¿Qué puedo hacer para dejar de autolesionarme o tener comportamientos dañinos?
Si alguna vez has sentido la necesidad de hacerte daño o recurrir a conductas autodestructivas, quiero que sepas algo muy importante: no estás solo/a y hay formas de superar esto.
Muchas personas usan la autolesión o hábitos dañinos como una forma de lidiar con el dolor emocional, la ansiedad o la sensación de vacío. Sin embargo, estas conductas no resuelven el problema de fondo y pueden generar un ciclo difícil de romper.
Si estás buscando ayuda para salir de este patrón, en este artículo exploraremos por qué ocurre la autolesión, cómo puedes empezar a manejarla y qué hacer para recibir apoyo profesional.
¿Por qué algunas personas se autolesionan o adoptan comportamientos dañinos?
La autolesión no es solo un acto físico, también puede manifestarse en conductas como:
- Golpearse o cortarse.
- Negarse a comer o sobrealimentarse como castigo.
- Consumo excesivo de alcohol o drogas para desconectarse.
- Ponerse en situaciones de riesgo de manera intencional.
- Aislarse completamente de los demás.
Si bien cada persona tiene una historia única, hay algunas razones comunes detrás de estas conductas:
1. Regulación emocional
Algunas personas recurren a la autolesión cuando sienten que sus emociones son demasiado intensas o difíciles de manejar. El dolor físico se convierte en una distracción del dolor emocional.
2. Sensación de vacío o desconexión
En ocasiones, quienes se autolesionan no lo hacen para «sentir dolor», sino para sentir algo. Pueden experimentar una sensación de vacío tan grande que el acto de autolesionarse les da un sentido de existencia, aunque sea momentáneo.
3. Castigo hacia sí mismos
Cuando una persona carga con sentimientos de culpa, vergüenza o baja autoestima, puede recurrir a la autolesión como una forma de «castigarse» por algo que cree haber hecho mal.
4. Expresión del sufrimiento interno
A veces, las personas no encuentran palabras para describir su dolor emocional, y la autolesión se convierte en una forma de comunicarlo al mundo.
Si te identificas con alguna de estas razones, es importante que sepas que hay otras formas de lidiar con lo que sientes sin lastimarte.
Estrategias para dejar la autolesión y comportamientos dañinos
Dejar de autolesionarse no ocurre de la noche a la mañana, pero hay estrategias que pueden ayudarte a romper el ciclo y encontrar maneras más saludables de manejar tus emociones.
1. Identifica los desencadenantes
El primer paso es notar qué situaciones o emociones te llevan a autolesionarte.
Pregúntate:
- ¿Qué estaba sintiendo justo antes de hacerlo?
- ¿Hubo algún evento que me hizo sentir así?
- ¿Qué pensamientos tuve en ese momento?
Llevar un registro en un diario puede ayudarte a reconocer patrones y anticiparte a esas situaciones.
2. Usa estrategias de sustitución
Si sientes la necesidad de autolesionarte, prueba cambiar la acción por algo que no implique daño, como:
- Apretar un cubo de hielo en la mano para sentir una sensación intensa sin lastimarte.
- Dibujar en tu piel con un marcador en lugar de cortarte.
- Romper papel, aplastar plastilina o rasgar tela para descargar la tensión.
- Ejercicios físicos intensos como hacer saltos, correr o golpear un cojín.
Estas acciones no reemplazan la terapia, pero pueden ayudarte a reducir el impulso de hacerte daño mientras encuentras estrategias más profundas para sanar.
3. Encuentra una manera alternativa de expresar tus emociones
Si la autolesión ha sido tu forma de liberar emociones, prueba con otras formas de expresión como:
- Escribir sobre lo que sientes en un diario.
- Dibujar o pintar tus emociones.
- Tocar un instrumento o escuchar música que te ayude a procesar lo que sientes.
El objetivo no es reprimir lo que sientes, sino encontrar formas seguras de expresarlo.
4. Cambia tu diálogo interno
La autolesión muchas veces está relacionada con pensamientos negativos sobre uno mismo. Si notas que tu mente se llena de frases como:
❌ «Me lo merezco.»
❌ «No sirvo para nada.»
❌ «Nada va a mejorar.»
Prueba cambiarlas por pensamientos más compasivos:
✅ «Estoy pasando por un momento difícil, pero puedo encontrar ayuda.»
✅ «No necesito lastimarme para validar mi dolor.»
✅ «Merezco tratarme con amabilidad.»
El cambio no ocurre de inmediato, pero practicar una voz interna más amable es un gran paso.
5. Busca apoyo profesional
Si sientes que no puedes salir de este patrón solo/a, buscar ayuda psicológica puede marcar la diferencia.
Un terapeuta puede ayudarte a:
- Comprender las razones detrás de la autolesión.
- Desarrollar nuevas estrategias para regular tus emociones.
- Trabajar en la autoestima y en el manejo del estrés.
La terapia Dialéctico Conductual (DBT) es una de las mejores opciones para tratar la autolesión, ya que enseña herramientas concretas para regular emociones intensas y romper ciclos dañinos.
¿Qué hemos aprendido hoy?
La autolesión y los comportamientos dañinos no son un capricho ni una señal de debilidad, sino una forma en que algunas personas intentan lidiar con su dolor emocional. Sin embargo, existen formas más saludables de manejar lo que sientes sin hacerte daño.
Si te has sentido atrapado/a en este ciclo, recuerda que no tienes que enfrentarlo solo/a. Hay ayuda disponible y puedes salir adelante.
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